Introducen ozono en cámaras frigoríficas para conservar los alimentos más tiempo
Según indicó Andalucía Investiga en una nota, a través de un generador de ozono en los almacenes de refrigeración, se consigue contrarrestar el etileno, un gas natural que acelera la maduración de los frutos y la descomposición de la carne y el pescado», afirmó su responsable, Juan Hurtado.
Una vez que el ozono logra actuar en estas cámaras frigoríficas, se alcanzan dos objetivos principales, la desinfección y la desodorización del aire del local. En el primer caso, el ozono activo producido asegura la destrucción de numerosos microorganismos, que pululan en la superficie de los alimentos, antes de su introducción en la cámara.
Esta contaminación comienza cuando empiezan las manipulaciones y transportes, que, por lo general, se efectúan a temperatura ambiente. Así, la refrigeración o la congelación en este momento no hace más que atenuar la proliferación bacteriana.
El otro objetivo que ha de perfeccionar aún más el equipo frigorífico consiste en la supresión total de olores con el doble fin de evitar, por una parte, que el hedor se transmita a la cámara o sobre mercancías almacenadas y, por otra, las molestias tanto para el cliente como para el personal de la instalación. El ozono presenta grandes ventajas y entre ellas la de destruir de un modo eficaz las emanaciones de amoniaco en una cámara refrigerada.
Pero el ozono no sólo elimina los olores existentes en una cámara de refrigeración. En lugares donde está permitido fumar, este sistema, canalizado a través de un aparato de climatización, acaba con el incómodo humo del tabaco y renueva el ambiente sin necesidad de introducir aire del exterior.
Los actuales extractores de humo, cuando absorben los olores, introducen aire de la calle, por lo tanto el aparato tiene que volver a climatizar el aire nuevo que ha entrado y esto conlleva un gran gasto energético que muchas empresas desconocen. Otras aplicaciones de este gas están encaminadas a desinfectar el agua de las piscinas.
PURIFICAR AGUAS
El contacto del agua con el ozono produce una reacción de oxidación capaz de acabar con gérmenes y bacterias sin necesidad de acudir a agentes químicos como el cloro, que una vez ha desinfectado las piscinas deja en las aguas residuos difíciles de eliminar.
El ozono es usado también para purificar las aguas provenientes de aljibes, fosas sépticas, aguas residuales que se usan para el riego e incluso la desinfección todo tipo de productos alimenticios, entre otros. Por ello, las empresas que venden verduras envasadas ya están incorporando el ozono en sus instalaciones para la desinfección de las verduras que manipulan antes de comercializarlas.